Como estudiante universitaria de primera generación en Princeton

Ana Patricia Esqueda habla sobre ser una estudiante universitaria de primera generación en Princeton, lo que significa para su familia y cómo encontró apoyo en la Universidad.

Ana Patricia Esqueda nació en Venezuela. Se mudó a los Estados Unidos cuando estaba en quinto grado y hablaba poco inglés. Ahora es estudiante de tercer año en Princeton. Es la primera de su familia que asiste a la universidad.

Esqueda se crió en Trenton, Nueva Jersey, con su madre y una familia extendida de tíos y primos. Vino al campus por primera vez cuando estaba en secundaria para participar en el Programa Pre-universitario de la Universidad de Princeton (PUPP). PUPP es un programa gratuito para estudiantes destacados de bajos ingresos de la zona de Princeton. Esqueda le está agradecida a PUPP por haberla animado a considerar universidades muy selectivas. Además la ayudaron con las solicitudes y a pedir ayuda económica.

“Lo más difícil de ser estudiante de primera generación es que no tienes a nadie que te pueda orientar, al menos no en casa," dice Esqueda, cuya especialización es Psicología. Esqueda vive en Whitman College.

“Mi mamá no sabía lo que era una declaración personal universitaria. Tampoco sabía cómo solicitar ayuda económica," dice Esqueda. “Son detalles que se dan por sentado al solicitar a la universidad, pero cuando solicitas… ¿cómo se lo explicas a tu familia? Es muy difícil."

La madre de Esqueda, Santa Berroa, dice que al principio a su hija se le hizo difícil adaptarse a la vida en Estados Unidos.

"Un cambio fue difícil que entrar al…tuviera esta cambio … de Venezuela hace este país … y encontrarse con esa barrera del idioma. Fue doloroso para mí saber que ella estaba en esta situación," Berroa dice.  

Pero después de ver a su hija prosperar en la secundaria y ser aceptada en la universidad, Berroa dice que los sacrificios valieron la pena. El rostro de Berroa se llena de orgullo y  de lágrimas cuando recuerda el decirle a la gente que su hija asiste a Princeton.

"Para toda la familia es grandioso dónde llegamos," Berroa dice.

En el campus, Esqueda cuenta con el apoyo de una comunidad de otros estudiantes de primera generación de bajos ingresos. El número de estudiantes FLI, como se refieren a sí mismos en Princeton, va en aumento. En la clase actual de primer año, el 17 por ciento de los estudiantes  son los primeros de sus familias en asistir a la universidad. El 22 por ciento recibe Becas Federales Pell para estudiantes de bajos ingresos.

Esqueda conoció a otros estudiantes FLI antes de su primer año al participar en el Freshman Scholars Institute (FSI). Este programa de verano de larga data introduce a un grupo selecto de estudiantes a Princeton mediante actividades académicas, cocurriculares y extracurriculares. Además Esqueda es miembro del Scholars Institute Fellows Program (SIFP), que ofrece a los estudiantes de pregrado tutorías, enriquecimiento académico y una red de apoyo compuesta de profesores, empleados y estudiantes durante sus cuatro años en el campus.

Esqueda dice que los programas han sido recursos sumamente valiosos en muchos sentidos, para solicitar pasantías e, incluso, para seleccionar una especialización. Son cosas que quizás son obvias para algunos estudiantes de Princeton, pero "los que somos estudiante de primera generación necesitamos esa ayuda."

Spanish translation courtesy of the Department of Spanish and Portuguese. The original version of this story is available in English